En un mundo tan complicado como el que vivimos es alentador ver aún se opta por ser cristiano y por reafirmar la fe que recibimos del bautismo... Lo que cabe ahora es una pregunta: ¿Somos conscientes de lo que significa CONFIRMAR LA FE?
Confirmarse significa VIVIR EL RITO que se realizó el día de la confirmación: avivar la vida de Dios en cada uno de los momentos y los acontecimientos.
Confirmarse significa asumir que la “fiesta del día” pasa pero al vida continua y exige compromiso
Confirmarse significa saber que la fe se oxida si no se alimenta y que es deber nuestro buscar ese alimento.
Confirmarse es superemos el divorcio fe-vida. No podemos seguir siendo “católicos por horas” sino asumir la responsabilidad que tenemos en este mundo.
Confirmarse significa vivir lo que Juan Pablo II les pedía a los jóvenes porque en ellos confiaba:
"Queridos jóvenes, la Iglesia necesita auténticos testigos para la nueva evangelización: hombres y mujeres cuya vida haya sido transformada por el encuentro con Jesús; hombres y mujeres capaces de comunicar esta experiencia a los demás. La Iglesia necesita santos. Todos estamos llamados a la santidad, y sólo los santos pueden renovar la humanidad".
(Mensaje del Papa Juan Pablo II a los jóvenes con motivo de la XX Jornada Mundial de la Juventud. Num. 7)