viernes, 13 de octubre de 2000

Sacrificio


Cuando me dijeron que tenía que preparar este tema la verdad la respiración se cortó pues hablar de Sacrificio en un mundo como el nuestro, resulta difícil pues está olvidado y su lenguaje no se quiere oír. Pensé y pensé y no sabía qué hacer hasta que descubrí que no tenía que ir muy lejos... lo tenía más cerca de lo que me imaginaba y era un lenguaje que todos podíamos conocer...

Sacrifico es igual a amor.... Sacrifico es igual a fuerza.... Sacrifico es igual a valentía...  Sacrifico es igual a madurez.... Todos estos significados encierra el sacrificio y veamos por qué:

Etimológicamente la palabra sacrificio indica la consagración de una persona o cosa a Dios, es deciur que se queda convertido en algo sagrado. El término se refiere a la ofrenda que se hace de un don visible a la Divinidad con el fin de vivir más íntimamente vinculados a Cristo. Es entregar lo poco que somos y podemos a Aquél que es el señor del cielo y de la tierra...

Partiendo de este supuesto nos resulta fácil comprender ahora qué es y por qué sus sinónimos.

Sacrificio es AMOR
Cuando amamos a alguien somos capaces de hacer hasta lo imposible porque esta persona esté bien... Pienso ahora en las mamás que no dudan en dar lo que tienen para que sus hijos estén bien, no importa lo que cueste, lo que suponga, se privan de lo que sea para guardar a sus hijos....  Cuando sabemos que Dios nos ama y que nosotros le amamos también le entregamos lo que tenemos, lo que somos, lo que podemos hacer y sobre todo lo que nos cuesta y aquí sucede algo singular, no sólo le doy lo poco que puedo sino que al mismo tiempo el me devuelve más... Cuando soy capaz de sacrificarme, crezco y maduro, templo mi voluntad y mi espíritu, adelanto y me hago persona.

Sacrificio es FUERZA
Esto es claro, lo vemos en los atletas, trabajan duro para alcanzar una meta, no importa lo que suponga, no importa lo que tengan que sufrir pues la mirada esta adelante.. Van acostumbrándose a esa exigencia y su cuerpo se hace fuerte. De la misma manera, en la medida en que somos capaces de sacrificarnos en la vida nos acemos fuertes, los problemas que vendrán no podrán hacernos desfallecer o desestabilizarnos pues nos hemos acostumbrado a soportar para vencer. 

Sacrificio es VALENTIA
Hay que ser valiente, hombres y mujeres de una pieza en donde no les asuste lucher y progresar, que no les asuste el testimoniar la fe y el tabajar pro ella. Quien se sacrifica es capaz de compartir en época de Navidad con otros menos favorecidos sin importar lo que esto suponga. Cuando alguien se sacrifica, sacrifica tiempo, comodidad, calor y comida buena es capaz de construir patria sin importar lo que suponga., 
Quien se sacrifica es valiente, SE HACE VALIENTE pues el peor enemigo es uno mismo, saber decir no cuando es no y si cuando es si. Saber hablar ante la injusticia y vencer la corrupción es de valientes qure a lo largo de la vida se van templando pues recordemos que el hierro se parte antes de doblarse pues ha sido tarbajado con fuego... Eso es el sacrificio en la vida, yn hacerse fuerte para no doblarse.

Sacrificio es MADUREZ
Cuando se hace lo que toca, cuando toco y como toca es cando realmente somos maduros, cuando asumimos un lugar, el que nos corresponde, dejando a un lado el “gustar” o “no gustar” pues la vida no es de momentos sino de siempre. Quien comprende esto se da cuenta que a lo largo de ella hay que saber renunciar a muchas cosas que en algunos momentos son válidas, pero que entorpecerían la misión que se ha de realizar.

Si lo anterior es verdad sólo en el plano humano no podemos olvidar otro aspecto: LA CRUZ, mayor muestra de sacrificio... debemos asumir la vida como un caminar con Cristo Crucificado que asumió el dolor del mundo para salvarlo y con él, nosotros, desde nuestra pequeñez, redimir.